Nuestra Historia está escrita en barro y al barro hay que acudir una y otra vez para descubrir y sorprender la vida de nuestros antepasados. A todo ello hay que añadir el encanto, la belleza y armonía que encierra cualquier humilde cacharro, quizás porque aún conserva, a pesar de los años, la huella caliente y entrañable de quién sabe qué desconocido artesano.
Esta experiencia creativa que propone el Centro de Arte Rupestre de Tito Bustilllo se compone de cuatro sesiones para conocer el más mínimo detalle de la evolución de la cerámica a lo largo de los tiempos. Cada una de ellas se articula de tal manera que puede ser realizada de forma independiente. Para todos los públicos.