Con el tiempecito que ya estamos teniendo he recordado la excursión que hicimos en Semana Santa a Avilés. Porque pasamos un día fantástico, pese a estar el tiempo como ahora (llovisqueando), gracias al Museo Alfercam por la mañana -cuya visita os recomendaría encarecidamente de no ser porque ha tenido que cerrar, temporalmente, sus puertas al público- y al Centro Niemeyer, a cuya visita dedicamos la tarde.
"Una plaza abierta a todo el mundo, un lugar para la educación, la cultura y la paz"