Un domingo ventoso donde los haya nos hicimos esta senda de Cabo Busto, preciosa preciosa preciosa, lo sepáis. Fácil facilita, más paseo que otra cosa, pero con el placer de pasar por bosque, y con el placer de bordear costa, que de todo tiene. ¡Si hasta Faro encontramos a mitad de camino!
Hay que ir hasta Busto, el pueblo, y al entrar en él, seguir los indicadores que nos indicarán "Escuelas", hacia la izquierda. Allí podremos dejar el vehículo en el recinto de las escuelas mismas y disponernos a comenzar.
Pronto alcanzamos el primer cruce: una casa nos dará dos opciones a elegir por cada uno de sus veras (se ve en esta foto al fondo del camino). Habremos de seguir de frente o no coger la bifurcación a la derecha.
Poco después el camino se bifurcará de nuevo tras pasearnos dejando campos de labor a la derecha ... tomamos el sendero de la izquierda como véis en la imagen, y acertamos, porque unos metros más adelante apareció la señal que debiera estar en la bifurcación :(. Este sendero nos llevó hasta un pinar que de nuevo nos puso a elegir camino: ¿izquierda? ¿derecha?
Esta vez escogimos el camino de la derecha, y acertamos otra vez porque nos encontramos la señal de "por aquí" en este sendero unos metros más adelante también.
Descendimos entre pinos y eucaliptos perdiendo de vista la luz del sol hasta llegar a un pequeño cauce de riachuelo con un puente bien guapo para hacerse fotos de la que lo cruzamosen un escenario casi mágico donde los protagonistas eran los helechos y la frondosidad exuberante.
Ascendimos por la senda unos 10 minutos no más, alcanzando así un camino principal que, entre maizales y con la frondosidad del bosque a la izquierda, nos permitió contemplar algunos pajarinos, e incluso un ratoncito de campo que nos tenía más miedo a nosotros que nosotros a él.
Seguimos este camino y directamente desembocamos en un mirador espectacular de toda la costa.
Este mirador es tan requetebonito que se ha preparado la zona como el área recreativa llamada “Monte de Cabo". Sin duda, es un lugar ideal para comer, como nosotros hicimos pese a no ser aún mediodía.
Se trata de una explanada con mesas y bancos desde la que se divisa toda la costa de una manera espectacular. Y allí, rodeados de margaritas y florecillas varias, porque estaba todo florido, dimos buena cuenta de los bocatas en un entorno que no hay dinero que lo pague.
Después continuamos por la senda que ahora sí que está muy bien señalizada, bordeando a una distancia más que prudente, la costa, luego no hay peligro de caídas.
Nos hemos ido encontrando con miradores colocados estratégicamente para que disfrutemos de las mejores vistas sin duda, hasta alcanzar en unos 15 minutos el Faro de Busto donde se encuentra el mejor mirador de todos, claro está, y en cuyos alrededores hay también una preciosa zona verde con mesas y bancos para comer tranquilamente.
Al frente del Faro se encuentran las islas de La Moura y de Las Mouchas; en el siguiente mirador divisamos la Playa del Serrón, llegamos a él tras bordear el faro, siguiendo la senda perfectamente señalizada, que continúa bordeando los acantilados hasta la Punta Arenoso, haciendo varias paradas más en este trayecto ya que se encuentran varios miradores pequeños más desde los que vimos los acantilados de hasta 70 metros de altura y pequeñas playas. La más grande es la Playa de Barchinas, final del recorrido costero de la senda
ya que enseguida el camino nos conducirá a una última bifurcación, que, siguiendo el camino de la izquierda franqueado de cipreses y alejándose del mar, nos conducirá hasta Busto, el pueblo.
Se trata de una explanada con mesas y bancos desde la que se divisa toda la costa de una manera espectacular. Y allí, rodeados de margaritas y florecillas varias, porque estaba todo florido, dimos buena cuenta de los bocatas en un entorno que no hay dinero que lo pague.
Después continuamos por la senda que ahora sí que está muy bien señalizada, bordeando a una distancia más que prudente, la costa, luego no hay peligro de caídas.
Nos hemos ido encontrando con miradores colocados estratégicamente para que disfrutemos de las mejores vistas sin duda, hasta alcanzar en unos 15 minutos el Faro de Busto donde se encuentra el mejor mirador de todos, claro está, y en cuyos alrededores hay también una preciosa zona verde con mesas y bancos para comer tranquilamente.
Al frente del Faro se encuentran las islas de La Moura y de Las Mouchas; en el siguiente mirador divisamos la Playa del Serrón, llegamos a él tras bordear el faro, siguiendo la senda perfectamente señalizada, que continúa bordeando los acantilados hasta la Punta Arenoso, haciendo varias paradas más en este trayecto ya que se encuentran varios miradores pequeños más desde los que vimos los acantilados de hasta 70 metros de altura y pequeñas playas. La más grande es la Playa de Barchinas, final del recorrido costero de la senda
Como veis es muy fácil y agradable, aquí tenéis el perfil de esta ruta circular que no os llevará más de un par de horas, tres si os vais parando con los peques, y con la que disfrutaréis un montón.
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